Tamaño: 82,5Mb
Idioma: Español
Guion: Ricardo Barreiro
Dibujo: Juan Jiménez,García Durán
Jean vive en París, un día como cualquier otro su reloj despertador suena a las ocho, tras una jornada monótona, insoportable y aburrida. Decide volver caminando a su casa, para despejarse; pero nunca llegará. Si Jean necesitaba un cambio, el que encuentra es el más insospechado y fantástico. Ahora Jean esta perdido en las calles de una ciudad desconocida, que parece ser infinita, donde tiempo y espacio se confunden, y cualquier tipo de alucinación es posible.
EL DATO: Una historia ingeniosa llena de homenajes a la historieta y al misterio, en donde sus protagonistas trataran de encontrar la salida de una ciudad interminable llena de aventuras.
Escrita por el ingenioso Ricardo Barreiro y dibujada por el maestro Juan Jiménez esta historieta se publico originalmente en Europa, en Argentina La publicación de Ciudad fue casi tan azarosa como sus calles. Comenzó a publicarse en el primer número de la revista Cuero, hasta el tercero, en que cerró. Tiempo después comenzó de nuevo, esta vez en Hora Cero, de Ediciones de la Urraca, pero tampoco pudo finalizar ya que la revista llegó hasta el número seis (en Argentina publicar comics es algo casi imposible)
Recién pudo verse la historia completa en la publicación en libro, realizada por Ediciones de la Urraca, en 1992.
Escrita por el ingenioso Ricardo Barreiro y dibujada por el maestro Juan Jiménez esta historieta se publico originalmente en Europa, en Argentina La publicación de Ciudad fue casi tan azarosa como sus calles. Comenzó a publicarse en el primer número de la revista Cuero, hasta el tercero, en que cerró. Tiempo después comenzó de nuevo, esta vez en Hora Cero, de Ediciones de la Urraca, pero tampoco pudo finalizar ya que la revista llegó hasta el número seis (en Argentina publicar comics es algo casi imposible)
Recién pudo verse la historia completa en la publicación en libro, realizada por Ediciones de la Urraca, en 1992.
Con respecto a Ciudad 2 podemos notar cierto holor a robar fama a la historia original para hacer unos mangos y aunque Barreiro sigue aportando nuevas cosas a ese "universo" podemos calificarla como un obra menor que nada tiene que ver con la original. aqui les dejamos los dos volumenes al precio de un clik, dedicado al amigo zetaatez que nos pidio estos comics que nos tardamos en subir.
CRÍTICA: CIUDAD de Ricardo Barreiro & Juan Giménez
(Extraído parcialmente de: trazosenelbloc.blogspot.com)
Escrito por EduXavi
(Extraído parcialmente de: trazosenelbloc.blogspot.com)
Escrito por EduXavi
La ciudad nos engulle, nos aprisiona en su red de calles, nos conduce a la locura, desemboca en el estrés, luchamos por sobrevivir en un medio hostil. No hay salida posible. No hay escapatoria factible. Ella dicta sus leyes, se conforma en que saquemos a relucir nuestro instinto de supervivencia. La ciudad como metáfora/alegoría de cárcel. ¿Somos verdaderos prisioneros de una jungla de cristal y cemento?
Barreiro, en un género como es el de "historias de ciudad" como punto de referencia, temática de la que demostraba cierta predilección (recordemos la posterior obra, que realizó junto a Eduardo Risso, como es “Parque Chas”) nos cuenta en Ciudad, en una serie de relatos engarzados, la locura que se nos plantearía si nuestra diaria vida monótona urbanita se transformase, de la noche a la mañana, en una locura surrealista sin final posible y lógico, en un deambular por un entramado de calles nada familiar para uno.
El protagonista, Jean, es un chico que pasa de un vacío quehacer diario lleno de dudas y problemas, con una relación de pareja que va de mal en peor, en una gran ciudad como es el París eterno, a vivir de repente en una ciudad muy diferente a la suya, como si de un sueño/pesadilla se tratara. Él es un “naufrago” que va a la deriva. No sabe dónde está, por qué está allí y cómo ha llegado a esa ciudad que carece de nombre, y lo más angustiante, no sabe hacia dónde va. Ella es simplemente “Ciudad”.
junto a Karen, otro naufrago que ha llegado hasta esta urbe, como tantos otros, intenta buscar una salida a este laberinto sin fin y, parece ser, sin escapatoria posible. A ambos les sucede todo tipo de peripecias, a cuál más irreal, hechos y situaciones que normalmente sólo viven en el subconsciente de los seres humanos, pesadillas que sólo son capaces de ser soñadas o fantaseadas.
Situaciones kafkianas que más parecen fruto de la manipulación de un ente superior invisible que sólo se dedica a jugar con los miedos y las esperanzas de los hombres. ¿Es la propia ciudad la que juega con la psique de sus moradores?
Barreiro, con un guión ágil e intrigante, acompañado perfectamente por el dibujo detallista del maestro Giménez, nos hace sentir parte de la “ciudad”, de creernos que pesadillas nuestras sí pueden volverse realidad. De cómo una sociedad tan urbanizada como la nuestra es capaz de verse inoperante e inutilizada, en un momento dado, por el sentimiento claustrofóbico de una “cárcel de hormigón”.
Y, cómo no, Giménez a los lápices es la opción ideal para representar mundos de ficción, de vivencias de ahora, en tiempo real, con un toque fantástico. El talento de un artista al servicio de la ciencia ficción.
Destacar la anécdota de la aparición del Eternauta en la última historia. Barreiro hace un pequeño homenaje a esta obra clave de la historieta argentina (obra de dos maestros como son Oesterheld y Solano López) con la aparición de su protagonista (como también hará en la otra obra comentada más arriba, Parque Chas) y que, además, tuvo el privilegio de escribir el guión de su continuación, a la postre el último de su carrera, “El Eternauta, el odio cósmico”. El Eternauta, capaz de viajar por toda la eternidad, al igual que esta ciudad eterna, capaz de transportar a sus habitantes a cualquier tipo de lugar/situación dentro de su maraña de calles y edificios sin fin.
Barreiro, en un género como es el de "historias de ciudad" como punto de referencia, temática de la que demostraba cierta predilección (recordemos la posterior obra, que realizó junto a Eduardo Risso, como es “Parque Chas”) nos cuenta en Ciudad, en una serie de relatos engarzados, la locura que se nos plantearía si nuestra diaria vida monótona urbanita se transformase, de la noche a la mañana, en una locura surrealista sin final posible y lógico, en un deambular por un entramado de calles nada familiar para uno.
El protagonista, Jean, es un chico que pasa de un vacío quehacer diario lleno de dudas y problemas, con una relación de pareja que va de mal en peor, en una gran ciudad como es el París eterno, a vivir de repente en una ciudad muy diferente a la suya, como si de un sueño/pesadilla se tratara. Él es un “naufrago” que va a la deriva. No sabe dónde está, por qué está allí y cómo ha llegado a esa ciudad que carece de nombre, y lo más angustiante, no sabe hacia dónde va. Ella es simplemente “Ciudad”.
junto a Karen, otro naufrago que ha llegado hasta esta urbe, como tantos otros, intenta buscar una salida a este laberinto sin fin y, parece ser, sin escapatoria posible. A ambos les sucede todo tipo de peripecias, a cuál más irreal, hechos y situaciones que normalmente sólo viven en el subconsciente de los seres humanos, pesadillas que sólo son capaces de ser soñadas o fantaseadas.
Situaciones kafkianas que más parecen fruto de la manipulación de un ente superior invisible que sólo se dedica a jugar con los miedos y las esperanzas de los hombres. ¿Es la propia ciudad la que juega con la psique de sus moradores?
Barreiro, con un guión ágil e intrigante, acompañado perfectamente por el dibujo detallista del maestro Giménez, nos hace sentir parte de la “ciudad”, de creernos que pesadillas nuestras sí pueden volverse realidad. De cómo una sociedad tan urbanizada como la nuestra es capaz de verse inoperante e inutilizada, en un momento dado, por el sentimiento claustrofóbico de una “cárcel de hormigón”.
Y, cómo no, Giménez a los lápices es la opción ideal para representar mundos de ficción, de vivencias de ahora, en tiempo real, con un toque fantástico. El talento de un artista al servicio de la ciencia ficción.
Destacar la anécdota de la aparición del Eternauta en la última historia. Barreiro hace un pequeño homenaje a esta obra clave de la historieta argentina (obra de dos maestros como son Oesterheld y Solano López) con la aparición de su protagonista (como también hará en la otra obra comentada más arriba, Parque Chas) y que, además, tuvo el privilegio de escribir el guión de su continuación, a la postre el último de su carrera, “El Eternauta, el odio cósmico”. El Eternauta, capaz de viajar por toda la eternidad, al igual que esta ciudad eterna, capaz de transportar a sus habitantes a cualquier tipo de lugar/situación dentro de su maraña de calles y edificios sin fin.
Buenisimo ciudad! Lo leí hace un par de años y me encantó
ResponderEliminarTiene muy buena pinta. Muchas gracias.
ResponderEliminarSaludos.
http://areku-desingblog.blogspot.com/
http://www.brushartdesigns.es/
esta historieta ya estaba en el blog la reflote por q estaban caidos los links.
ResponderEliminary si esta buena es similar a parque chas, gracias x comentar
esto la leí gracias a mi amigo leitox. no tenía ni idea de que era y me tope con un capítulo apócrifo del eternauta! encima dibujado por juan gimenez!!
ResponderEliminarla verdad que la parte en la que juan salvo comenta respecto de las aventuras que tuvo hasta llegar a ese punto hacen que a uno se le caiga la baba de las historias que nos hubiera regalado ese equipo creativo o el propio barreiro que era fan del personaje y de todos los proyectos que generó solamente se le dio "odio cósmico" que es un bodrio.
y la aparición en "parque chas" es un cameo muy al estilo del que hacen los monstruos de la universal en esta historia que nos ocupa. saludos y liberen los comentarios!!!
Muchas gracias, excelente aporte
ResponderEliminarBarabaro, un retorno a la aventura.Gracias!!!!!!!
ResponderEliminarExcelente y felicitaciones ,que la paz sea con todos nosotros ,gracias y bendiciones..................
ResponderEliminarHola,links caidos
ResponderEliminarHola donde puedo conseguir el link para descargarla?
ResponderEliminar