Leí recientemente dos historietas breves y las vamos a comentar juntas, pero no mezcladas. Ambas tienen en común (Como para encontrarle un sentido al hecho de juntarlas) que son protagonizadas por detectives, aunque ninguno de ellos sea tradicional.
Martin Hel es uno de los muchos personajes creados por la prolífica pluma de Robin Wood para la Editorial Columba. Sin embargo, este material estaba inédito en Argentina (Hasta 1999, claro está) ya que se trata de historias que Robin escribió para Italia donde continuó publicando tras el cierre de la mencionada editorial. Hel es un investigador privado que se centra en casos paranormales, desde vampiros a posesiones pasando por cualquier otra situación anormal. Además es muy bien parecido lo que le facilita bastante la actividad en su otra pasión: las mujeres. Convive en una elegante casa antigua con el mismísimo Drácula.
Esta historia (La que resultó ser auto conclusiva) comienza con una hermosa introducción de 17 páginas de una sola viñeta (Splash pages) las que están diseñadas de tal modo que el lector es parte de la historieta. Estamos caminando por la calle mientras nos vamos acercando a la residencia de Martin Hel. Al llegar a la puerta nos atiende el Conde Drácula quien, mientras nos acompaña a recorrer la casa, nos habla un poco sobre él y su amigo Detective para dar luego paso al comienzo de la aventura llamada “Brel”.
Brel es un hombre mayor que vive solo en una derruida casa antigua. El cartero se presenta en su jardín con un paquete. Lo hace entrar a su casa, lo secuestra y asesina. La policía se presenta a los pocos días averiguando por el paradero del muchacho y Brel confiesa el asesinato. Les indica a los oficiales que el cadáver se encuentra en el sótano donde, además del cartero, encuentran varios cuerpos violados, mutilados y en estado de descomposición.
Mientras tanto, Martin es contratado por una bella mujer llamada Catarina Ross Pallandt, descendiente de Marja Ross Pallandt, célebre por haber asesinado 11 personas y conservar sus cabezas en vinagre. Catarina está reuniendo información de su antepasada con la intención de escribir un libro sobre ella y entre los papeles escritos por Marja, encontró una lista. En esta lista figuran nombres y direcciones de personas de todas las épocas, incluso de algunos que nacieron mucho después de haber muerto su antepasada… y entre ellas, la de Brel. Martin nota que muchos de los nombres de la lista corresponden a personas reconocidas por haber cometido varios asesinatos. Gracias a tener los contactos necesarios, logra concretar una entrevista con Brel en el manicomio donde está recluido y enseguida notan que no se trata de una persona común y corriente. Brel despliega su influencia y todos los reclusos comienzan a comportarse de forma agresiva peleando unos contra otros y atacando a todo el personal.
Será tarea de Martin Hel averiguar quién o qué es Brel, que poderes posee, que es lo que une a Marja Pallandt con este hombre y como lograr detenerlo.
La historia es entretenida y está muy bien escrita aunque no es lo mejor de Robin quien ha logrado cosas muchísimo más interesantes y con mayor desarrollo. Son 96 páginas que se leen bastante rápido ya que no traen tanto texto como solía poner en las historias de Nippur o Dago. Esto es aprovechado por Lito Fernández para dar mayor lugar al dibujo. Las primeras páginas ya comentadas son increíbles, el paseo por la casa de Martin está excelentemente logrado. En el resto de las páginas el dibujo es muy bueno también pero la disposición de las viñetas es algo confusa, no quedando muy claro cuál es el orden a seguir para la lectura. El color utilizado es bastante deficiente, colores planos sin matices ni sombras lo que no ayuda a crear los ambientes propuestos por el dibujante.
La edición cuenta con una hermosa ilustración de portada realizada por Enrique Zambrana, y la calidad de la revista es igual a las publicaciones de los anuarios de Columba, con lomo y papel delgado y poroso que trasluce el revés de las páginas. Todavía se consigue muy fácil y barato en las casas de saldo así que lo recomendamos.
Esta historia transcurre en 1992, durante la presidencia de George Bush Padre. Bogie, que es un detective exactamente igual a Humphrey Bogart, se encuentra en el aeropuerto de Glasgow en Escocia. Aparece un hombre de talla similar que la suya al cual lleva hasta un lugar apartado, lo noquea y lo suplanta en su vuelo hacia New York. Una vez en el avión, abre y revisa el maletín de aquel hombre y descubre que es un dentista que se dirige a “La convención anual de la Asociación Dental” que se llevará a cabo en el Hotel Plaza de Manhattan. Encuentra también una revista en la que está marcado un artículo que habla de esta convención y de la asistencia del Vice presidente Dan Quayle al evento. Pero Bogie descubre también un mensaje escondido dentro del artículo, donde se habla de un atentado contra la vida del vicepresidente. La agenda del dentista confirma las sospechas de Bogie, tratarán de matar a Quayle y la C.I.A está involucrada, por lo que no puede confiar en nadie.
Se infiltra en la convención y por la noche, se descuelga desde la azotea en el balcón de la suite presidencial, noqueando a los agentes de inteligencia y llegando hasta el vicepresidente. Le comenta el atentado que está por sufrir, pero Quayle no confía mucho en él y quiere llamar a sus agentes. Bogie se opone y a la fuerza lo saca por la ventana de la habitación hasta el piso inferior y desde allí a la calle.
La noticia del secuestro del vicepresidente se propaga rápidamente, y Bogie empieza a escapar mientras intenta proteger la vida del gobernante.
La noticia del secuestro del vicepresidente se propaga rápidamente, y Bogie empieza a escapar mientras intenta proteger la vida del gobernante.
Llega al despacho oval una comunicación urgente desde Escocia informando que un paciente mental ha huido de su país con destino a Manhattan, este tiene delirios de creerse Bogart en sus películas de detectives y puede incluir a otros en sus locuras a veces hasta con violencia…
Toda la seguridad nacional se pone en movimiento para dar con el lunático y rescatar al vicepresidente. Bogie sin embargo, convencido de su accionar, redoblara sus esfuerzos para salvaguardar la vida de Dan Quayle….
La historia que escriben Grant y Wagner es muy ingeniosa con ráfagas de absurdo que resultan muy divertidas. Los escritores no dejan pasar la oportunidad de dejar en ridículo tanto a los funcionarios yanquis como a los agentes de la C.I.A. De a poco van forzando la credibilidad de la situación hasta la llegada del comunicado desde Escocia que aclara todo el panorama para luego, dar rienda suelta a las escenas más graciosas y ridículas de la obra.
Por su parte, Robin Smith hace un trabajo correcto pero sin descollar nunca. Si bien los rostros de los personajes están bien logrados (Sobre todo el de Bogart), tanto las expresiones como los cuerpos están faltos de dinámica y resultan forzados en líneas generales. De todos modos, le da un aire retro que se complementa bien con la idea de una vieja película de detectives.
Y tras la doble dosis de detectives, nos despedimos sin dejar pistas….
Nos leemos en el Archivo!
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