En una especie de prólogo, Chadwick nos relata que ha pasado mucho tiempo desde aquella vez en que el humano conocido como Ron Lithgow, en un viaje a las montañas, fuera secuestrado por alienígenas, alienígenas que extirparon muchos de sus sentidos y capacidades, despojándolo así de su forma humana... Al abandonar las montañas, jamás alguien volvio a ver a Ron... O por lo menos a su versión de carne y hueso.
En killer smile aparecen nuevamente los amigos incondicionales de concrete, Maureen y Larry, a los cuales se suman otros habitués que tuvieron mayor protagonismo en pasadas aventuras.
La apuesta de Chadwick parece sencilla, pero no, durante los 4 capítulos de esta mini-serie, Paul nos presenta un dilema que a veces circula en nuestros pensamientos (?): qué harías si te encuentras con un psicópata armado que decide convertirte en su rehén?
Lo que debería haber sido una simple carga de combustible termina transformándose en una especie de persecución televisada, con Larry en el papel del fugitivo y conduciendo la camioneta de su amigo Ron, que en otra parte de la ciudad se encuentra reposando en su trono de cemento, dialogando con Maureen, su amiga científica.
Para Larry, todo lo que vive resulta ser un paseo por la calesita del horror, y para concrete, es la desesperación de la incertidumbre... A medida que el tiempo transcurre vemos a concrete jugar su papel de héroe local, movilizado por la desaparición de Larry.
El lado humano de concrete, es decir, Ron, esta intacto, sabe que su amigo es un chamuyero cualquiera que se distrae por el primer culo que se le cruza, que no es la persona con más luces de la cual se pueda hablar, a todo eso, se suma que por cada lugar donde lo busca ha ocurrido un desastre... Hasta llegar a un desenlace que pareciera predecible, pero la genialidad del autor hace que eso cambie.
Siempre estuve fascinado con el dibujo de Chadwick, y sobre todo cuando no hay colores, Killer smile es una serie completamente a color, y si bien es verdad que fue lo más criticado en su momento, por algo Paul ganó el eisner a mejor serie en B&N, también es verdad que el laburo de Elizabeth Chadwick es bastante acertado, más si se tiene en cuenta como Paul labura con las sombras en algunas secuencias, y qué mejor coequiper que su propia esposa. Otro punto a favor del color es la edición anglosajona, por suerte es la que tengo, que no es de ese papel barato de antaño tipo gacetilla que se usó desde casi siempre en casi todo, sino un papel liso que resalta muy bien cualquier detalle y que, trabaja bien con el reflejo de la luz.
De la edición de dark horse puedo contar que contiene un imperdible "foro del autor" donde Paul desarrolla temas no solo concernientes al noveno arte, o a la aventura misma, sino que también escribe un poco sobre otros autores y dibujantes, y sobre su trabajo en DH y LEGEND.
Para el episodio final de killer smile, el foro del autor se decanta por publicar unas misivas a las cuales Chadwick de cierta manera "responde sin responder", y también se sigue explayando como en los números anteriores.
Otro plato fuerte dentro de la edición, son las historias cortas que el mismo creador de concrete fue desarrollando (guión y dibujo): "100 horrors!" Se suponía debían llegar a las 100 historias que no solo estaban presente en el volumen 4, pero eso no llegó a concretarse.
Si buscan este comic en español, Norma editorial es la respuesta. Tengo entendido que publicó todo lo hecho por Chadwick, y se comenta mucho los 7 tomos donde se recopila la totalidad de su obra.
La revista CIMOC (también de Norma) supo publicar historias de concrete, creo, a partir de la última etapa de la revista, #150 en adelante. Esa es otra joya con la que me hice este año.
Consideraciones del editor: cinco años pasaron desde la última vez que leí algo de este fantástico personaje, un lustro, sí, pero fue debido a que mi última lectura me prometí tener algo de concrete entre mis manos, y no hablo de una tablet cargada de material digital.
Gracias al Ywin' pude cumplir la promesa de atesorar la obra en pelpa del maestro Paul Chadwick, y es hoy que puedo contar que entre mi demás humilde colección de comics, se halla la mini serie killer smile.
Esta mini-serie conforma una parte de la obra de Chadwick, pero es dentro de todo lo hecho, una de las más especiales, y no porque yo la tenga. Killer smile fue creada en la primera mitad de los 90s, con la particularidad de que si bien dark horse fue la que publicó, fue previamente la idea y convocatoria de Frank Miller y John Byrne lo que produjo el advenimiento de nuevas historias de franquicias de renombre. Es así entonces que bajo el nombre de LEGEND, nombres como el de Mignola, los propios miller y byrne, Gibbons, Art Adams, y otros más (junto a Chadwick), acercaron historias nuevas para sus ya reconocidas franquicias: madman, hellboy, sin city, next men, monkeyman, y un largo etcétera... y CONCRETE!
Hasta otro informe comiquero!
Grande Casval querido!
ResponderEliminar¿Acaso no se puede usar hotmail en el blog para comentar?